Una buena gestión de la cadena de suministro depende de un abastecimiento constante de datos precisos. Sin un control efectivo, la ineficacia puede empezar a afectar negativamente a tus procesos de trabajo y, por consiguiente, a tu negocio.
Tener acceso a los datos e información apropiados aportará un valor considerable a tus operaciones. Disponer de datos precisos es especialmente importante para el área de compras, en el que conocer bien a tus proveedores puede reducir drásticamente los riesgos operativos.
Recientemente realizamos un webinar sobre la importancia del análisis de datos en las compras, en conjunto con la Asociación de Profesionales en Compras, Abastecimiento y Logística (APROCAL), donde Paola Ovalle, Account Manager para América Latina, habló sobre cómo gestionar los datos y cómo nos puede ayudar para mejorar el rendimiento de la cadena de suministro.
¿Para qué podemos utilizar los datos de la cadena de suministro?
1.- Identificar y mitigar riesgos. Si sabemos que algunos de nuestros proveedores críticos se encuentran en una situación financiera complicada, podemos anticiparnos y mitigar el riesgo de una disrupción en nuestro suministro. Y para ello se pueden implementar distintas estrategias de colaboración que permitan que la cadena siga funcionando. Estas estrategias pueden incluir desde la revisión de términos de pago, la colaboración o alianzas con otros proveedores, hasta la búsqueda de proveedores alternativos u otras fuentes de abastecimiento.
2.- Análisis comparativo o Benchmarking. Si tenemos información suficiente podemos evaluar el estado de nuestros proveedores y nuestra cadena en su conjunto, en comparación con los proveedores y cadenas de otras empresas que participan en nuestros sectores. Tener a la mano esta información será útil para implementar planes de desarrollo de proveedores y también para identificar nuevos proveedores .
3.- Rendición de cuentas. La información nos permitirá asegurarnos que todas las empresas que participan en nuestra cadena de suministro están en cumplimiento con la normativa vigente, que no cometen actos de corrupción, que tienen sistemas de gestión de la calidad, así como políticas implementadas para prohibir el trabajo infantil y la esclavitud moderna. Y en un espectro general, que las empresas con las que trabajamos son acordes con los valores de nuestra propia organización.
