En pocas palabras, todos somos responsables de gestionar la seguridad y salud, ya sea en nuestra vida personal o en el trabajo. La legislación en la materia confiere asimismo una responsabilidad adicional a los empleadores, que no solo deben proteger a sus empleados sino a quienes entran en contacto con ellos como resultado de sus actividades o, como los denomina la terminología de la ISO 45001, a «otras partes interesadas». A medida que los proyectos de cadenas de suministro ganan complejidad, decidir quiénes son los responsables de todo lo relacionado con la salud y la seguridad en el lugar de trabajo puede parecer una tarea abrumadora. Además, una vez identificados quiénes son los responsables en esta materia, también habrá que determinar sus responsabilidades y, lo que es más importante, demostrar que las están cumpliendo.
Mejora del cumplimiento de las normas de Seguridad y Salud Laboral
Todos los integrantes de una organización son responsables de garantizar su propia seguridad y las de quienes les rodean, pero ¿por qué es tan importante que cada uno de nosotros asuma esta responsabilidad? La razón más obvia deriva de la necesidad de evitar que tanto los empleados como cualquier otra persona sufran daños o lesiones, de cumplir con las obligaciones legales que nos corresponden y de evitar problemas con las autoridades. Dicho esto, existen otras razones, como los posibles daños reputacionales, los riesgos financieros o incluso penas de cárcel. Así, por ejemplo, el impacto reputacional y financiero que tuvo la explosión de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon en 2010 derivó en unas enormes repercusiones para BP, incluida una reducción de sus ventas en gasolineras de hasta el 40%, tal y como se pudo acreditar.
Más recientemente, la investigación de la torre Grenfell, que estudia las circunstancias relacionadas con el incendio desatado en 2017 (en el que fallecieron 72 personas), sigue revelando graves deficiencias en lo que respecta a la delegación de deberes en diversas disciplinas relacionadas con las obras de la torre, como resumía de forma sucinta un artículo publicado por Megan Kelly en la revista especializada Architects Journal, que lleva por título «I was not acting as clerk of works, says Grenfell clerk of works (Yo no ejercía de jefe de obra, afirma el jefe de obra de Grenfell)». Gozar de plena visibilidad sobre los proveedores de la cadena de suministro es crucial a la hora de garantizar la capacidad de la empresa en asegurar el cumplimiento con la normativa vigente. Esta es una de las razones por las que las empresas buscan una ayuda imparcial para aportar transparencia en sus cadenas de suministro.
Aun siendo un pequeño contratista, resulta igualmente importante ser consciente de las cuestiones de seguridad y salud relativas a todos tus proyectos, y demostrar tu capacidad a la hora de cumplir con las responsabilidades inherentes. A la vista de los últimos acontecimientos, las investigaciones e indagaciones públicas no escatiman esfuerzos para distinguir entre quienes asumen el cumplimiento de sus responsabilidades y aquellos que no lo hacen en absoluto.
Riesgos ocultos en Seguridad y Salud
Resulta sencillo decir que vivimos en un mundo en el que existen políticas y procedimientos para todo, en particular, para los aspectos relacionados con la seguridad y salud. Pero por mucho que las políticas y procedimientos existentes nos sirvan para acreditar que existe una concienciación acerca de la responsabilidad, la cuestión no acaba ahí.
No se puede probar aquello que no se ve, pero existen muchas formas de facilitar la tarea, por ejemplo, mediante la evaluación como herramienta para detectar riesgos ocultos en lo que respecta a la seguridad y salud, así como las áreas de mejora en tu cadena de suministro. Por último, la capacidad de visibilizar el buen trabajo realizado puede abrir oportunidades de negocio potenciales, y, lo que es más importante, esta capacidad resulta más reveladora que cualquier texto recogido en una política o un procedimiento. Nuestra herramienta de precalificación, nuestras auditorías y nuesta plataforma de gestión de la CAE proporcionan a los compradores un nivel de transparencia en sus cadenas de suministro y les permite entender en qué medida se alinean la cultura y los valores de sus proveedores con los suyos propios.
Todos deberíamos tomarnos el tiempo necesario para aprender más acerca de nuestras cadenas de suministro, para garantizar que nuestros principios y expectativas, todo aquello que a menudo recogen nuestras políticas de salud y seguridad, son respetados por las personas y las empresas en las que confiamos para prestar servicios en nuestro nombre. En un mundo en el que impera la agilidad, para las empresas es cada vez más importante saber con quién trabajan y en quién confían, así como ser conscientes de que el trabajo que llevan a cabo probablemente está más que nunca en el punto de mira.