La sostenibilidad de la cadena de suministro de una empresa depende de una serie de cuestiones, incluido el sector empresarial, la posición geográfica, las expectativas de los interesados, las prioridades del negocio y la cultura organizacional.
Para un suministro sostenible es preciso incluir las mejores prácticas y elementos clave en la creación de valor, así como los indicadores económicos que son utilizados comunmente. A continuación los siguientes cinco puntos más importantes, relativos a siete áreas de la cadena de suministro, a saber:
1. Gestión de Riesgos
Mitigar los riesgos y hacer frente a las preocupaciones sociales, ambientales y económicos en la cadena de suministro es posible. Las empresas pueden proteger su cuota de mercado y reducir los costes relacionados con estos riesgos identificando un riesgo probable y desarrollando estrategias para minimizar las consecuencias en terminos de sostenibilidad. En última instancia, el objetivo es el desarrollo de las redes de la cadena de suministro lo suficientemente flexibles para responder eficazmente a las situaciones cambiantes. Además, una fuerte gestión social, ambiental y económica puede ayudar a las empresas a afrontar los riesgos asociados a la imagen que podría afectar a la lealtad del cliente y afectar negativamente a la cuota de mercado de estas empresas.
2. Reducción del coste y mejora de la eficiencia
La relación entre la cadena de suministro y la sostenibilidad se considera erróneamente un coste innecesario para muchas empresas, cuando en realidad es exactamente lo contrario. Los que comenzaron a introducir conceptos relacionados con la sostenibilidad de forma proactiva en su propia cadena de suministro, han ahorrado recursos financieros, reducir costes y añadir valor a sus actividades.
Se ha demostrado que la gestión sostenible de la puesta en marcha, tales como energía, agua y materias primas, reduce significativamente los costes de contratación de las empresas y al mismo tiempo reduce el impacto ambiental y la salud de los operadores de la cadena de suministro. Por otro lado, invertir en la compra de bienes de producción local y mejora de la calidad de los proveedores locales ha ayudado a las empresas en gran medida reducir el coste de los bienes y materiales importados, y por lo tanto el apoyo al crecimiento y la prosperidad de la economía local
3. Producir productos sostenibles
Los productos sostenibles están logrando éxito en una gama más amplia de la población cuando comenzó a otorgarse una gran importancia a la sostenibilidad y al planeta. Los clientes y los consumidores son cada vez más propensos a tener en cuenta el impacto social y ambiental en el momento de la compra. Hacer sus productos más sostenible puede hacerle llegar a un segmento de mercado en crecimiento. Este tipo de decisiones sostenibles pueden posicionar a una empresa en un entorno más competitivo y menos expuesta a riesgos.
En general, producir, independientemente de tener en cuenta los factores negativos externos, tales como los relacionados con la sostenibilidad, es más rentable. No obstante, un estudio a largo plazo, que incluye un análisis de los riesgos financieros, conlleva generar situaciones aún más rentables.
Muchas empresas se centran principalmente en la definición de un proceso lineal de suministro de material, en lugar de preferir un tipo de producción para reducir los residuos y la contaminación. Sin embargo, esto puede ser posible gracias a la utilización de productos innovadores y la definición de un procedimiento claro, donde se incluyan el uso de materias primas no tóxicas o menos tóxicas, entrega y disposición al final de la vida del producto, a fin de incluir la sostenibilidad en todo el ciclo de vida del producto.
4. La sostenibilidad como un vehículo para la transparencia y un mejor comportamiento de los proveedores
La creación de una cadena de suministro sostenible consiste en utilizar la propia cadena para garantizar un trato justo a los sociedad; y que comercialmente, lo tengan en cuenta los posibles consumidores cuando vayan a escoger entre un producto u otro. La participación de los proveedores es clave. Tienen el objetivo de garantizar el desarrollo de un producto final capaz de enmarcarse en la mentalidad sostenible aceptada por los consumidores.
El proceso de precalificación y validación de proveedores, proporciona a las empresas compradoras no sólo información crucial sobre las tendencias, los cambios del mercado y otros factores externos que puedan afectar a la empresa, sino que les permite garantizar una cadena de suministro sostenible de principio a fin. Por dicho motivo, contar con una base de proveedores potencial en esta materia ayuda enormemente en la toma de decisiones, permitiendo asegurar buenos resultados corporativos a nivel global.
5. Conducta Ética empresarial
Una cadena de suministro sostenible también significa la promoción de buenas prácticas y procedimientos éticos para la dirección, responsables de todo el ciclo de vida de los bienes y servicios. Estas prácticas ayudan a construir una economía sana, que van en contra del fraude, la corrupción y las relaciones comerciales poco éticas. Los costes directos derivados de la corrupción son considerables y afectan a la calidad del producto. Los costes indirectos están relacionados con la gestión del tiempo y los recursos invertidos para hacer frente a cuestiones como: la responsabilidad legal y el daño causado a la reputación de una empresa.
Tratar estos temas con los proveedores ayuda a mejorar la calidad del producto, reducir el fraude y los costes relacionados, para mejorar la reputación de la compañía y contribuir a la construcción de un ambiente de negocios sostenible.