En abril de 2019 se implementó en el Reino Unido el acuerdo marco sobre Consumo optimizado de energía y reducción de emisiones de carbono (SECR, por sus siglas en inglés), en virtud del cual las grandes compañías deberán presentar informes anuales de sus emisiones de gases de efecto invernadero.
La presentación de informes de sostenibilidad ha pasado de ser una actividad específica de unos pocos a una práctica habitual de las empresas, cualquiera que sea su tamaño o su sector. De hecho, clientes, compradores, empleados, inversores, accionistas y gobiernos están pidiendo cada vez más a las empresas una mayor supervisión e información del impacto social y medioambiental de sus operaciones.
Son varias las formas en que una empresa puede beneficiarse de un informe de sostenibilidad, que compensa con creces cualquier carga administrativa. Los datos contenidos en estos informes pueden suponer una gran ventaja, ya que pueden mejorar la eficiencia, el rendimiento o la reputación de tu empresa.
Los riesgos de equivocarse
Obviamente, no solo se trata de cosechar beneficios. Existen varios riesgos para aquellas empresas que no logren familiarizarse con el sistema de informes de sostenibilidad. Las consecuencias del incumplimiento del cada vez mayor número de normas medioambientales pueden ser graves. Aparte del perjuicio reputacional para la empresa, los dirigentes serán considerados ahora responsables si no toman medidas sobre el cambio climático en caso de riesgo previsible.
Junto con los inversores, también las compañías de seguros consideran cada vez más los informes de sostenibilidad como un indicador de rendimiento empresarial. Así, el año pasado vimos como Swiss Re y BNP Paribas anunciaban que dejarían de asegurar a empresas con un 30 % de exposición a determinados combustibles fósiles.
Pero las empresas no suelen trabajar solas; las cadenas de suministro también se encuentran en el punto de mira. Los compradores analizan cada vez más el comportamiento medioambiental de los proveedores con los que trabajan, y muchas empresas incluyen la sostenibilidad de toda su cadena de suministro en el cálculo del suyo propio. Los proveedores que no tienen la capacidad de cumplir criterios más estrictos, o de calcular con precisión y comunicar su huella de carbono, se arriesgan a quedar excluidos.
Con tantas cosas en juego, queda clara la importancia no solo de hacer informes de sostenibilidad, sino de hacerlos bien. Por ello, en los últimos años ha surgido un gran número de nuevas herramientas que ayudan a las empresas a calcular y comunicar sus emisiones de carbono. ¿Por cuál empezar?
A continuación citamos los cuatro aspectos principales que deben tenerse en cuenta a la hora de escoger una herramienta de informes de sostenibilidad.
Herramientas gratuitas/de pago
En el mercado encontrarás de todo, desde simples herramientas de cálculo hasta los programas más sofisticados. También encontrarás algunas herramientas gratuitas que pretenden ser una manera rentable de ayudarte a cumplir con tus obligaciones en cuanto a la presentación de informes. Al final de cuentas, como casi siempre, el valor del producto va en función de lo que pagas.
Con una herramienta gratuita, no sabrás en qué estándares y en qué referencias se está basando, con qué frecuencia se actualiza o si está auditada externamente. Esta falta de garantías supone un grave riesgo. ¿Puedes fiarte de los resultados que te está dando? Evidentemente, si no necesitas más que una estimación rápida de tus emisiones para ver dónde puedes ahorrar costes, un calculador gratuito puede ser suficiente. Pero para presentar un informe sobre un programa de cumplimiento, a rubricar por tu director, es importante tener más garantías.
Esto es lo que te ofrece nuestra certificación Carbon Reduce, un proceso simplificado, fiable y reconocido internacionalmente que proporciona a clientes y proveedores informes y auditorías sobre energía y emisiones de carbono certificados y totalmente independientes.
¿Qué necesitas calcular, y por qué?
Es importante considerar qué normas necesita cumplir tu herramienta informática. En lo que se refiere a las normas ISO, por ejemplo, es fundamental tener claro cuáles son las que se aplican a tu caso. Esto dependerá de lo que pretendes calcular y del porqué.
Estas normas ya no se limitan estrictamente a la «rendición de cuentas sobre emisiones de carbono», sino que adoptan ahora una visión más amplia de todas las formas de impacto de las empresas en el medio ambiente, y de sus cadenas de suministro. Cumplir las normas ya no es solo «marcar casillas» en un formulario, es tomar medidas y generar un cambio positivo en el mundo.
Preparar tus procesos para el futuro
El mundo de la ciencia de la sostenibilidad, la reglamentación y el cumplimiento está cambiando rápidamente, y tienes que estar seguro de que tu herramienta te mantiene actualizado. Cada año, el gobierno británico publica nuevos factores de emisiones, y si no los usas en tus cálculos, la exactitud de los informes de tu empresa puede dejar mucho que desear.
Elige una herramienta que te mantenga al tanto de los nuevos datos y metodologías. Nuestra herramienta Carbon Reduce lo hace por ti, a la vez que te permite comparar tu rendimiento con el de tus semejantes.
Utiliza los formatos apropiados para los informes
Si solo vas a comunicar tu huella de carbono en tu informe anual, poco importa la forma en que presentes la información. Sin embargo, si vas a comunicar la información como prueba de cumplimiento con una norma ISO específica, deberás presentarla en el formato preciso (actualmente, el SECR no exige ningún formato concreto). La herramienta Carbon Reduce te evita todo el proceso, haciéndolo automáticamente por ti.
Los informes de sostenibilidad están dando aún sus primeros pasos; aún son muchas las empresas que tienen que aprender, y hacerlo rápido. En Achilles, no solo somos fuente de conocimientos y asesores para los clientes y proveedores de nuestras redes profesionales, sino que, gracias a Carbon Reduce, también te proporcionamos las herramientas que necesitas para facilitarte al máximo el proceso de elaboración de informe de sostenibilidad.
