América Latina es una región con vastos recursos naturales y un gran potencial para liderar la transición hacia un modelo energético sustentable. Con más de 660 millones de habitantes y una creciente demanda de energía, América Latina lucha por encontrar un equilibrio entre el desarrollo económico y la preservación del medio ambiente.
1. Recursos Energéticos en la región
América Latina se beneficia de una amplia gama de recursos naturales, lo que brinda a la región una clara ventaja competitiva en la transición hacia una economía baja en carbono:
- Hidroeléctrica: Países como Brasil y Paraguay dependen significativamente de la energía hidroeléctrica, con proyectos emblemáticos como la presa de Itaipú, una de las más grandes del mundo. Sin embargo, este modelo energético enfrenta riesgos asociados al cambio climático, ya que las variaciones en los patrones de lluvia afectan el volumen de agua disponible, comprometiendo la generación eléctrica.
- Energía solar y eólica: Chile, México y Brasil lideran el desarrollo de proyectos de energías renovables no convencionales en América Latina, aprovechando su ubicación estratégica. Destaca el desierto de Atacama, que registra algunos de los niveles de radiación solar más altos del mundo, consolidándose como un epicentro para proyectos de energía solar. Asimismo, regiones favorables para la energía eólica impulsan la diversificación de sus matrices energéticas.
- Recursos fósiles: A pesar de los avances hacia la transición energética, países como Venezuela, México y Colombia continúan dependiendo de los hidrocarburos como principal fuente de energía. Este contexto contribuye significativamente a las emisiones de gases de efecto invernadero en la región, especialmente debido al uso intensivo de carbón y petróleo.
2. Desafíos de la Transición Energética:
América Latina enfrenta una serie de problemas relacionados con la transición energética de renovables:
- Infraestructura inadecuada: Muchos países de la región carecen de la infraestructura necesaria para integrar fuentes de energía renovable en las redes eléctricas existentes. Aunque algunos han iniciado estos procesos, la brecha entre las áreas urbanas conectadas al sistema eléctrico y las zonas rurales fuera de la red sigue ampliándose.
- Uso desigual de fuentes de energía: A pesar de los esfuerzos por electrificar y promover las energías renovables, persisten desigualdades significativas entre las áreas urbanas y rurales. En América Latina, millones de personas aún carecen de acceso a un suministro eléctrico confiable, lo que refleja un desarrollo energético desigual.
- Financiamiento: La mayoría de los proyectos exitosos han dependido de financiamiento basado en préstamos, ya que las inversiones de capital en este sector son consideradas de alto riesgo y requieren un horizonte a largo plazo. Instituciones como el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial han desempeñado un papel clave en este ámbito, mientras que la participación de capital privado sigue siendo limitada.
- Políticas desajustadas: Los frecuentes cambios políticos en la región impactan negativamente en la continuidad presupuestaria, lo que desalienta las inversiones privadas de largo plazo y crea incertidumbre en el desarrollo de proyectos energéticos sostenibles.
3. Oportunidades en la Sustentabilidad,
Sin embargo, existen oportunidades para que la región se desarrolle de manera sustentable:
- Transición hacia renovables: Países como Uruguay ya generan más del 90% de su energía eléctrica a partir de fuentes renovables, sirviendo como modelo para el resto de la región.
- Electrificación del transporte: Ciudades como Santiago de Chile están implementando flotas de buses eléctricos para reducir emisiones en el sector transporte.
- Innovación y tecnología: Startups y proyectos tecnológicos están desarrollando soluciones para optimizar el uso de energía, como redes inteligentes y almacenamiento eficiente.
4. Implicaciones Globales y Regionales
El liderazgo de América Latina en energía sustentable podría posicionar a la región como un actor clave en la lucha contra el cambio climático. Además, podría generar empleos verdes, diversificar las economías locales y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
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América Latina enfrenta un momento crucial en su camino hacia un futuro energético sustentable. Aprovechar su riqueza natural, promover políticas públicas consistentes y fomentar la innovación tecnológica son pasos clave para garantizar un desarrollo económico que respete los límites del planeta. La región tiene el potencial de ser un ejemplo global de cómo equilibrar crecimiento y sustentabilidad en el sector energético.
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Fuentes:
-Banco Interamericano de Desarrollo (BID). (2023). Energía renovable en América Latina: Oportunidades y desafíos. Disponible en: https://www.iadb.org
-CEPAL. (2023). Transición energética en América Latina y el Caribe: Estrategias para la descarbonización. Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Disponible en: https://www.cepal.org
-International Renewable Energy Agency (IRENA). (2022). Renewable Energy Market Analysis: Latin America. Disponible en: https://www.irena.org
-Global Energy Monitor. (2023). Renewable Energy Projects in Latin America. Disponible en: https://www.globalenergymonitor.org