Actualización del metro de Estocolmo para satisfacer las demandas de una ciudad en constante cambio
Estocolmo es una ciudad que está experimentando grandes cambios. Se trata de una de las ciudades con un crecimiento más rápido del mundo; no en vano, su población ha aumentado significativamente en los últimos diez años hasta superar los dos millones. Alrededor de 35,000 personas de todo el mundo decide hacer de la capital sueca su hogar cada año.
Dada la gran cantidad de nuevos residentes, la infraestructura de la ciudad debe crecer y adaptarse. El hecho de que el equivalente de dos autobuses llenos de residentes se traslade a la ciudad cada día, supone que la tarea de actualizar la capacidad del sistema de transporte público de Estocolmo no sea fácil.
El metro de Estocolmo se está sometiendo a importantes cambios, lo que brinda excelentes oportunidades a proveedores. Además de la apertura de un nuevo túnel de 6 km por debajo de la ciudad en 2017, el gobierno va a invertir 298,000 millones de coronas suecas para añadir 20 km y diez estaciones nuevas al sistema.
Sin embargo, el proyecto no es sencillo. Como se sabe, la ciudad de Estocolmo plantea interesantes desafíos en proyectos de construcción a gran escala, lo que implica un mayor peso en el proceso de compras.
Principales desafíos
La complejidad del proyecto del metro de Estocolmo radica en dos factores principales. En primer lugar, los factores geológicos exigen que la construcción deba realizarse a gran profundidad y, en segundo lugar, el metro está situado en pleno corazón de una ajetreada ciudad, por lo que un gran número de personas dependen de él cada día.
La construcción subterránea en Estocolmo debe tener en cuenta las zonas de fisura y la elevada presión del agua, por lo que los nuevos túneles deben sellarse y estabilizarse a medida que se van construyendo. No hay duda de que para hacer frente a los desafíos que conlleva la construcción de las estaciones a gran profundidad de Sofia y Gullmarsplan, estando la primera a 100 metros bajo tierra, se debe contar con un personal altamente cualificado y con una amplia experiencia. En la estación de Sofia se tendrán que utilizar montacargas de gran velocidad y capacidad en lugar de ascensores para transportar a los pasajeros a tanta profundidad.
Con un proyecto de estas dimensiones, será imposible evitar ciertas interrupciones a los viajeros del metro, al igual que a los conductores, peatones y ciclistas. Y en una ciudad tan concurrida como Estocolmo, es importante asegurarse de que la gente pueda seguir desplazándose por ella lo más fácil y rápidamente posible.
Experiencia y capacidad
En vista de estos desafíos, es extremadamente importante encontrar a los proveedores adecuados para garantizar el éxito del proyecto del metro de Estocolmo. Se necesita una combinación única de experiencia y capacidad para hacer frente no solo a la envergadura del trabajo, sino también su complejidad.
El proyecto está siendo dirigido por Förvaltning för utbyggd tunnelbana (FUT, la gestión del ferrocarril suburbano), organismo creado por la administración de transporte regional de Estocolmo (SLL). Como organismo público, FUT debe operar conforme a la legislación sobre contratación pública, particularmente la Ley sobre contratación pública en los sectores del agua, transporte y servicios postales, LUF. Dado que las aptitudes y la capacidad necesarias son tan específicas, el proceso de contratación se ha abierto a compañías de todo el mundo. Además, se ha implantado un sistema de precalificación con el fin de garantizar que los proveedores sean los adecuados para el proyecto.
El proyecto utiliza el sistema Achilles TransQ para verificar que los proveedores poseen el nivel adecuado de habilidades y capacidades técnicas, además de los recursos financieros necesarios, para incorporarse con éxito al proyecto.
Recopilamos y validamos los datos de los proveedores y mitigamos los riesgos con el fin de garantizar que proyectos de este tipo cuenten con la cadena de suministro de máximo rendimiento, más sostenible y segura. Brindamos confianza a los compradores al poder estar seguros de trabajar con proveedores que aportarán eficacia al proyecto. Asimismo, proporcionamos a los proveedores la oportunidad de documentar y demostrar claramente sus competencias e idoneidad al proyecto, lo que les aporta visibilidad ante posibles compradores.
Construyendo el futuro del transporte suburbano
Estocolmo no es la única ciudad que tiene previsto actualizar un sistema de transporte suburbano obsoleto. En todo el mundo, las grandes áreas metropolitanas tratan de utilizar la tecnología y los avances más recientes en materia de construcción para hacer frente a las demandas de las crecientes poblaciones.
Por ejemplo, la ciudad de Sídney está actualizando su estación de metro más concurrida para adaptarse a un aumento de pasajeros desde los 270,000 hasta los 450,000 en las próximas dos décadas. Mientras tanto, el proyecto de transporte automatizado de pasajeros LAX comenzará a transportar a los viajeros desde Los Ángeles hasta su aeropuerto en 2023. Todos estos proyectos de infraestructura de gran envergadura son costosos, complejos y dependen de grandes cadenas de suministro, por lo que su éxito recae en la puesta en práctica de un proceso de compra adecuado.
El proyecto del metro de Estocolmo es un ejemplo de cómo las ciudades de todo el mundo están respondiendo a las necesidades de sus crecientes poblaciones. Proporcionamos la inteligencia empresarial y los conocimientos necesarios para que el proceso de compra no consuma todo el tiempo, energía y dinero del equipo del proyecto. Además, al reducir costes y riesgos, podemos ayudar en proyectos a gran escala, como el metro de Estocolmo, y a proveedores de todo el mundo a colaborar de manera más eficaz y alcanzar los mejores resultados.
«Todo lo que debes saber acerca del nuevo metro de Estocolmo» – FUT