CINCO MEDIDAS QUE LAS EMPRESAS PUEDEN ADOPTAR YA PARA COMPRENDER LA ESCLAVITUD MODERNA Y ELIMINARLA DE SU CADENA DE SUMINISTRO
Achilles, proveedor líder en gestión de riesgos de proveedores, recibió a más de 250 compradores y proveedores de las comunidades de servicios públicos, ferroviaria y de la construcción en el evento Achilles Live celebrado este mes en Londres.
Una cuestión crítica de derechos humanos que afrontan todos los sectores es el modo de abordar la esclavitud moderna en la cadena de suministro. La ponente principal, Klára Skrivánková de Anti-Slavery International, se dirigió a los delegados y destacó algunas medidas esenciales directas, significativas y fáciles de ejecutar que las empresas pueden adoptar hoy en día.
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- Reconocer el problema. Es real y existe en todas partes. La responsabilidad de la organización no es solo confiar en que no se produce en su cadena de suministro, sino demostrarlo.
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- Examinar la cadena de suministro. Las empresas han de identificar los eslabones más débiles y cuestionar cualquier ausencia de información. La visibilidad y la transparencia son fundamentales para comprender mejor los riesgos existentes en la cadena de suministro.
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- Ser partícipe de la solución. Las organizaciones deben cerciorarse de distribuir en cascada por la cadena de suministro políticas y códigos de conducta redactados cuidadosamente; tienen la responsabilidad de integrar buenas prácticas y políticas efectivas en toda la empresa.
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- Colaborar para producir un cambio. Mediante la colaboración con toda la cadena de suministro, las empresas pueden crear una voz más fuerte y potente y luchar por conseguir reformas entre todos.
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- Generar un debate en torno a este tema. Las organizaciones tienen que asumir la responsabilidad más allá de la simple publicación en su sitio web de una declaración sobre la esclavitud moderna. Se trata de una cuestión presente en las agendas de las reuniones, de un tema de conversación entre proveedores, y de un motivo para conocer mejor a los trabajadores.
Una maraña compleja de cadenas mundiales de suministro dificulta la visibilidad de la esclavitud moderna; sin embargo, a raíz del compromiso demostrado por compradores y proveedores en Achilles Live, ha quedado patente la intención de obtener más información y arrojar mayor claridad sobre las políticas, y cómo ir más allá de la simple demostración del cumplimiento.
Durante su discurso de presentación en Achilles Live, Klára Skrivánková comentó: «La comprensión de las prácticas de trabajo en todos los sectores se torna una medida operativa esencial. Deberían integrarse las comprobaciones debidas en todas las áreas de actividad, de modo que se definan análisis comparativos y normas por toda la cadena de suministro».
«Las organizaciones que ya hayan demostrado su cumplimiento deben ser ahora proactivas y transparentes al proporcionar pruebas de las prácticas laborales en todos los ámbitos del negocio, y aquellas que aún no lo hagan, deben comenzar a hacerlo. Las empresas deben optar por formar parte de la solución y retirarse de aquellas que se han convertido en parte del problema».
En abril de 2017, Achilles presentó la Auditoría de prácticas laborales, que permite a las empresas adquirir mayor visibilidad y comprender las prácticas laborales de su organización y cadena de suministro. La auditoría les permite escudriñar tres aspectos específicos de este ámbito tan complejo de la legislación: el compromiso de los trabajadores, el cumplimiento de las normativas sobre archivos del personal, y el cumplimiento de las normativas en materia de sistemas de gestión. El producto complementa la oferta básica de auditorías de Achilles.
Jay Katzen, director ejecutivo de Achilles, afirmó: «Estamos comprometidos con la erradicación de la esclavitud moderna mediante una estrecha colaboración con compradores y proveedores. Hemos presentado hace poco la Auditoría de prácticas laborales, que permite a nuestros compradores y proveedores adquirir mayor visibilidad y comprender las prácticas laborales en su organización y cadenas de suministro».
«Debemos esforzarnos colectivamente para conseguir una reforma sobre la esclavitud moderna; es nuestra responsabilidad moral y ética colaborar para resolver ese problema juntos. No debería ser una opción, debería ser una obligación, ya que sin duda se trata de una de las cuestiones de derechos humanos más importantes de nuestra época».
